El australiano sigue hablando |
Mientras prepara su debut en el US Open nada menos que ante Andy Murray, Nick Kyrgios reflotó el partido del escándalo ante Stan Wawrinka en Montreal y, sin renunciar a su particular verborragia, reconoció como legítima la sanción "en suspenso" de la ATP, que operará como medida de supervisión por los próximos seis meses.
"Me parece justa la sanción. Merecía un castigo. Obviamente, aún soy joven, pero la ATP muestra que no va a tolerar ese tipo de cosas, con lo cual definitivamente he aprendido la lección", remarcó Kyrgios, según recoge el periódico The Observer.
¿Qué contempla la pena? Suspensión de 28 días a nivel ATP, en caso de que el jugador incurra en abuso verbal o físico en cualquier torneo del circuito, o bien acumule cinco mil dólares en multas por otras ofensas de aquí al 24 de febrero de 2016.
"Sé que debo mantener las cosas en orden y ajustar mi comportamiento. Pero tampoco voy a dejar de mostrar mis emociones. No estoy interesado en cambiar lo que soy", relativizó el australiano.
¿Su revisión del episodio en Canadá? "No pensé que me iban a tomar los micrófonos, pero pasó. Solo me queda aprender de ello y obviamente no es algo que volvería a hacer. De todas formas, tampoco voy a decir que me avergüenza que se haya escuchado. Para nada".
"A Stan le pedí perdón de manera pública y privada -insistió-. Si no lo acepta, ya no es mi problema. Con Donna [Vekic] no fue en persona, pero también le hice llegar mis disculpas".
"Con Thanasi [Kokkinakis] no cambió nada y a decir verdad muchos jugadores fueron muy comprensivos", redondeó Kyrgios. En efecto, el binomio australiano se juntará en Nueva York para compartir cancha en dobles.
Foto: Getty Images
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