El primer set resultó ser muy cambiante en su desarrollo: en un inicio de partido arrollador para el griego de 22 años, el marcador se puso 4 a 1 a su favor y parecía indicar que todo se encaminaba a una victoria rápida y cómoda para en nacido en Atenas. A base de garra, lucha y una sustancial mejora en su tenis, Zverev logró revertir su mal comienzo en la final, logró quebrar a su rival en dos oportunidades, encadenó 5 games consecutivos y se quedó con el primer set por 6-4.
Ya en el segundo set el trámite del encuentro resultó ser otro desde el inicio: ambos jugadores se mostraron muy sólidos, el desarrollo de las acciones fue muy parejo y casi no mostraron fisuras con su turno de saque. Si bien Sascha pareció mostrar una leve superioridad y contó con oportunidades para liquidar el partido, no las supo aprovechar y el segundo parcial llegó a un tie-break. Allí, el ex número 3 del mundo fue superior a Tsitsipas, demostró que estaba decidido a cerrar el match y se lo llevó. De esta manera, la final del Abierto Mexicano de tenis quedó en manos de Zverev por 6-4 y 7-6(3).
Poco pesó el historial a su favor que traía consigo el griego Tsitsipas en la previa del encuentro: 5 victorias y una caída, con el aliciente de que el alemán únicamente había podido derrotarlo allá en el 2018, cuando ganó el primer enfrentamiento entre ambos en las semifinales de Washington por 6-2 y 6-4.
Sabor a revancha para Zverev tendrá esta consagración en el ATP 500 de Acapulco, ya que se tomó revancha de la edición del 2019 cuando cayó en la final ante el australiano Nick Kyrgios. Salud, campeón.
📷: Prensa @AbiertoTelcel
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