El español habló de todo un poco |
“Las comparaciones nunca son buenas. Ni cuando las cosas van bien ni cuando van tan mal", abrió, en conferencia de prensa, en relación a sus últimas versiones dentro de la cancha. "El año pasado terminé bien, este año empecé bien pero tuve un accidente en Australia que no me gustó. Pero lo hecho en Australia no lo puedo solucionar. Hice un buen trabajo en casa y espero dar lo mejor de mí. Intento dar el máximo. El circuito es muy duro como para añadir torneos. Si me hubiera ido mejor en Australia no estaría aquí. Este año, Buenos Aires no estaba en mis planes. Pero desde el primer minuto que perdí en Australia mi cabeza estaba en volver”.
Sin embargo, su traspié en el debut en Melbourne no fue la única razón que lo motivó a venir a Buenos Aires: “Argentina es un país que ama el tenis. Tengo la máxima ilusión por volver aquí, con amigos y en donde me tratan lo mejor posible. Siempre me hicieron sentir como un argentino más. Cada vez que vine, me fui con energía positiva. Y además se juega en pista de tierra. Por eso la decisión de volver”.
También hizo mención a su próximo rival, que saldrá del choque entre Juan Mónaco, que reaparece en el circuito, o el italiano Marco Cecchinato, surgido de la qualy: “Ojalá me enfrente a “Pico”, que es gran amigo mío. Significa que volvió con una victoria”.
El español, además, se refirió a la lesión de Roger Federer. Cuando ambos compartieron roles en el Consejo de Jugadores de la ATP, el suizo era menos propenso a los cambios, mientras el español exigía un calendario menos exigente. Hoy, los problemas físicos llegaron para quien hoy está Nº3 del mundo. “Lo siento por él. Nunca es bueno que un compañero tenga problemas. Después del comienzo de año se puede permitir un mes de descanso, aunque nunca sea fácil porque las lesiones son un tema importante del deportista. Lo ideal es que las recuperaciones sean rápidas. Si eso pasa, sumará confianza en su juego”.
Por otro lado, dio lugar al gran momento de Novak Djokovic, número uno indiscutido al momento, ratificado en el Abierto de Australia: “Para que Nole baje el nivel, se tiene que sentir apretado. Si los de atrás no aprietan, mentalmente no siente el golpe. Pero nada le está pasando. No se lesiona ni le está pasando algo extradeportivo. Es, sin dudas, el mejor por todo lo que está haciendo. Por mi parte, busco estar mejor que el año pasado y quiero sentirme en situaciones de competir. Después se verá si se lo puede alcanzar”.
Por último, habló sobre los Juegos Olímpicos, uno de los objetivos del año, luego de la frustración de 2012, cuando no pudo acudir por lesión: “Nunca tuve espíritu de revancha. Eso distorsiona la realidad. En 2012 fue complicado, porque de todos los eventos que me perdí, esa fue la decisión más dura. Uno tiene muy pocas oportunidades de estar en los Juegos. Tuve una sola chance de jugar en plenitud. Tuve la suerte de conseguir un gran resultado (en Beijing 2008 fue medalla dorada al vencer a Fernando González en la final) pero en 2012 tenía la chance de ser el abanderado y estar cerca de casa. Vivir en la Villa Olímpica no tiene precio. Es única e inolvidable. A diferencia de otros deportistas, no podemos prepararlo a conciencia. Mi ilusión es máxima para Buenos Aires, Río, Indian Wells y Miami. La motivación es día a día. Pero los Juegos siempre estarán en mi cabeza”.
Foto: Argentina Open
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