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| El español se fue en coche |
Borrón y cuenta nueva. Tras una gira sobre polvo de ladrillo con dudas y un paso en falso en Roland Garros, donde cayó en cuartos de final ante Novak Djokovic, las respuestas de Rafael Nadal -increíblemente- empiezan a aparecer sobre césped. El español manejó con lucidez cada una de sus presentaciones y, tras algunos problemas en el inicio, yendo de menor a mayor. Sus últimos dos partidos, sus puntos máximos. Invita a soñar.
El servicio de Nadal, su gran pilar en la final. Al igual que lo fue en toda la semana. Con variantes de velocidad y efecto, el español sacó máximo provecho de su condición de zurdo para lastimar con el saque. Este domingo, en la definición ante Troicki, apenas entregó una oportunidad de quiebre (salvada) y sólo dejó 14 puntos en el camino durante la hora y 26 minutos de acción.
Esa única posibilidad de break, justamente, se dio en el comienzo del encuentro. Nadal pasó apuros en su primer turno de servicio, pero reaccionó a tiempo y supo enderezar la historia. Con un Troicki también en buena forma a tono con su año tras un olvidable 2014, el primer set se terminó decidiendo en el desempate. Mejor arranque del español, que terminó pesando en el marcador. Del 2-1 al 5-2, que marcó sentencia.
El golpe de gracia de Nadal, rápido. El actual N°10 del mundo no dejó pasar su primera -y única en el partido- chance de quiebre y tomó el control por 3-1. Ganó sus siguientes dos juegos de servicio sin ceder puntos y quedó en una posición decisiva, con el saque para ganar el torneo. Con autoridad, quedó 40-15. Troicki amenazó con una recuperación, pero la tercera fue la vencida. Un nuevo match point, victoria y título para Nadal, el N°66 de su carrera y cuarto sobre césped.
El español, que no ganaba un título en esta superficie desde Wimbledon 2010 (jugó la final en All England también en 2011), ahora se ilusiona con llegar a Londres como uno de los ocho cabeza de serie. El tradicional torneo de césped abre una puerta para su ilusión, con su particular método de preclasificación, que contempla los resultados sobre la superficie en los últimos doce meses.
Nadal, de nuevo en sintonía. Por lo menos así lo dejó en claro esta semana en Stuttgart. La próxima semana, en Queen's, con Stan Wawrinka y Andy Murray como principales amenazas, una prueba mayor.
Foto: Getty Images
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