El alemán Alexander Zverev, 24 años y número 3 mundial, vuelve a ser el maestro del tenis profesional masculino. Reeditó su éxito en Londres 2018 convirtiéndose en el primer campeón de la nueva sede, el Pala Alpitour de Turín (Italia). Destronó al ruso Daniil Medvedev, 25 años y número 2, por 6-4 y 6-4 en una hora y quince minutos de clausura en las ATP Finals.
Excepcional cierre de campaña de Sascha, que ya había anunciado su óptimo estado de forma sometiendo en semifinales al serbio Novak Djokovic. Volvió a tener un día de inspiración para vengar su racha negativa con Medvedev, su verdugo en la fase de grupos, con el que no había podido en los cinco compromisos previos. Ahora iguala la serie (6-6), mostrando la superioridad de su inicio.
Sexto título de Zverev este curso, el decimonoveno total. El Masters llega tras el oro olímpico y las victorias en Acapulco, Madrid, Cincinnati y Viena. Ha ganado 59 partidos y ha perdido 15. Le falta la guinda de un Grand Slam, que seguirá buscando la próxima temporada. Da por finalizado este 2021 siendo el primer 'maestro' que repite después de cinco ediciones con nuevo campeón.
Daniil Medvedev debería estar la semana que viene en Madrid disputando las Davis Cup Finals, a las que renunció Zverev por no estar conforme con el nuevo formato. El moscovita cedió la hegemonía de París-Bercy a Djokovic, entregó la de las ATP Finals a Zverev, en un evento en el que había sumado nueve partidos ganados seguidos. Lejos del estelar 2020, pero no se puede quejar de un curso en el que reinó en el Open USA, su primer 'grande', ganó cuatro competiciones.
La final no tuvo mucha historia porque fue un monólogo de Zverev. Mantuvo el excelente juego exhibido horas antes frente a Novak Djokovic. Ganó 41 de 54 puntos con un saque intocable. No concedió bola de rotura, sólo un 'iguales'. Un muro, pleno de moral y con la raqueta bien afilada.
Al contrario que un Medvedev raro, en el sentido de que careció de chispa alguna. Ni siquiera mostró ese carácter fuerte que le ayuda a reaccionar en ocasiones complicadas. Estuvo mustio, poco ligero en los desplazamientos. Si medió algún problema físico, lo escondió porque no hubo ni vendajes ni peticiones de asistencia.
Más tarde, ante los medios de comunicación, aseguró que "algo faltó, pero no sé qué, para ser honesto. Quizás el cansancio físico o que no estuve al ciento por ciento mentalmente".
📷: Getty
No hay comentarios.:
Publicar un comentario